19 mayo 2009

como un pez, muero por la boca

como buen neurótico, algunas cosas me dan miedo
las demás, pánico
y aunque no sepa hablar
estoy decididamente en contra de la negligencia de lo nodicho
prefiero, siempre, tener excusas para arrepentirme
a no tener una sóla razón por la que obrar
me rehuso a ser una fábrica de cicuta
aunque presumo ceguera y convicción de kamikaze
me jacto de ser hábil para los negocios truncos
un estúpido que apuesta su fortuna al caballo flaco
como discípulo obediente de la razón
no entender me angustia
no saber qué esperar me resulta desesperante
perder el hilo me descose
la liviandad me pone tenso
su hostilidad me colma de preguntas
el desamor me desarma y me revuelve
me re duele
me re tuerce
me re pulsa
me re pudre todas las ganas
y me re seca todo el deseo