sucede que a veces
pocas, críticas veces
la verdad es una sola
hay sólo una versión posible
hegemónica, indialectizable, monopolar
esas pocas veces
verídicas
ciertas
magníficas
no sobornables
son las erupciones de la realidad
ahí, sin poesía, sin karma, sin redundancia
sin sutilezas, sin ironía, sin espejismo
sin respuesta, sin entusiasmo y sin amparo
la mandíbula retrocede en golpe seco
y lo más parecido a la ignominia
se monta en el hígado como en una mula
para ver llegar
las risas soberanas del olvido