02 octubre 2013

manifiesto realizando

hay un mandato que cae por mi espina
como verdad inconmovible y es ley
que el caos deseante y rumiante de estas aguas nacidas
bajo el sol del escorpión y la luna del pez
habrán de sintetizarse en la cabra que comanda
sin distracciones ni concesiones
el camino que me llevará hacia la reunión
con destinos claros y singulares
y en el ascenso habrá ripio y habrán rocas caídas
y peligro de derrumbe y derrapes y vuelta a empezar
manteniendo firme la visión
y en franca inspiración para seguir de a pie
aunque comiencen a pinchar las rodillas
-treinta años habitando la tierra-
haciendo pactos con dioses y demonios
dioses y demonios de mí
y sus pluriformes especímenes
pactando nunca más con el olvido
y nunca más con los verticalismos
creyendo con fuerza en las enseñanzas
de todos los seres que se manifiestan
los más antiguos y los más nuevos
la disciplina es en las acciones
que los individuos crean como colectivo
de un bondi universal
en el que cada cual es lo que trae, lo que comparte
lo que recibe, y aquello de lo que forma parte
y no me entrego más, entonces,
a las pseudo-estructuras y los pseudo-sistemas
que reivindican
la rigidez momentánea y perpetua
del Nombre del Amo
simplemente, porque no lo creo
y no puedo creerlo
en el año dosmiltrece
con toda esta potencia, la claridad y la paciencia
de haber llegado a este punto, y habiendo probado
tantos puntos de colores infinitos
sólo resta encontrar la escalera, el canal o el cauce
que agrupe y ordene en un son estos ideales
y los convoque a ser música o materia